La reconversión al desnudo: Un bolívar de mañana, 100 billones de ayer
Desde este viernes 1 de octubre entra en vigencia una nueva reconversión monetaria en Venezuela, que le quitará ceros al actual bolívar.
Los salarios, en el camino, se disolvieron. "Cobramos, quincenal, menos de tres dólares", dijo Marelys Guerrero, una maestra, de 43 años, que cobra millones, pero devaluados.
La entrevistada le teme al redondeo. Si algo queda en 4,5 tras la reconversión, "no va a costar 4,5, sino 5", aseguró desde una tienda en Chacaito, ubicada en Caracas.
El saliente cono monetario, que tiene como tope el billete de 1 millón, convivirá unos meses con el nuevo y sus denominaciones: una moneda de un bolívar y billetes de 5, 10, 20, 50 y 100 bolívares, según lo publicado en France24.
Con los venezolanos intentando protegerse de la inflación más alta del mundo, proyectada en 1.600% para este año por la firma privada Ecoanalítica, el dólar ha desplazado al bolívar.
Además, más de dos tercios de las transacciones en Venezuela se hacen divisas, según estimaciones privadas.
¿QUÉ PASA CON LA RECONVERSIÓN?
El poco efectivo circulante se usa básicamente en el transporte público. En este sentido, Nicolás Maduro habla del "bolívar digital", pidiendo la "digitalización" total de pagos.
Hay que destacar, que con regularidad se escucha la frase "¡Te compro tu dólar!". La misma es gritada por jóvenes con gruesas fajas de billetes de bolívares. Ante la falta de efectivo, los buses y las paradas son casas de cambio ambulantes.
CEROS INTERMINABLES
Mientras Marelys teme nuevos saltos inflacionarios, trabajar con seis ceros menos consuela al contador Rodrigo Bermúdez.
"Es un alivio para nosotros", comentó Bermúdez, quien muestra a la AFP una factura en la que debe dividir un cobro en cuatro partes para poder incluirlo en los sistemas de contabilidad usados en su compañía.
Las reconversiones fueron habituales en Latinoamérica, en especial en los tiempos de hiperinflación en países como Argentina, Brasil o Perú en las décadas de 1980 y 1990. Argentina incluso creó otra moneda, el austral, que luego desapareció para volver el peso.
Aunque Maduro restringió el gasto público y limitó el crédito, que prácticamente ha desaparecido, los precios siguen aumentando, incluso en dólares.
"Si uno espera que la inflación se comporte igual que en los últimos meses, es muy probable que en unos tres o cuatro años el gobierno deba reconvertir nuevamente", advierte Bárcenas.
Esta reconversión se produce solo tres años después de la anterior, en 2018, que eliminó cinco ceros al bolívar.